Hoy he pasado un buen rato mirando al microscopio y descubriendo el plasmodium. Ha merecido la pena.
viernes, 19 de julio de 2013
Al microscopio
Lo bueno de llegar es que es preciso saber partir. Estamos preparando la salida, por eso trabajamos con los enfermeros para poder hacer despacito el traspaso de todos los pacientes que hemos seguido estos días. Silvi ya sabe preparar las fórmulas de nutrición y cada día se mantiene ocupada cuidando de los malnutridos y estudiando los manuales. Papá Maloba ha cogido gran maestría en el arte de las curas. Hemos dado algunas clases y parece que ya comprende para que sirve cada cosa. El desinfectante... Los parches... Las gasas... Estos momentos de "enseñanza" son otras de las grandes alegrías que me llevo en la mochila. Son momentos compartidos. Ellos aprenden un poco de lo poquísimo que yo sé, y yo aprendo "un mucho" de la medicina tropical que ellos conocen al dedillo. ¿Os acordáis del chick?, técnicamente se llama Tunga Penetras (por fin hemos dado con el nombre) y no hay más solución que extriparlos como se pueda. Los manuales hablan de la asepsia, aquí se hace con un palito afilado... Así que la solución que se nos ocurrió no valía, porque no era para ese bicho.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Lo bueno de un amigo en el Congo son... las fotos que hace!
ResponderEliminarJajaja gracias amigo!!!
Eliminar